viernes, 30 de diciembre de 2011

Ramas de invierno


(AGO. Ramas de invierno. Diciembre de 2011)
         
           Quién sabe si el dolor

            es una ilusión muerta

            lo mismo que las hojas del árbol

            cuando caen

            y pertenece al amplio

            corazón

            de los hombres

            sufrir eternamente

            las estaciones largas

            de la vida.
 

            Si esta noche tan cálida

            sería una noche más

            si no estuvieras tú y alumbrara

            la luna.


            Si me dices:

            amor, me has desi-

            lusionado.

            Y es que, en el fondo,

            no comprendes

            que en el amor un alto porcentaje

            son defectos...

domingo, 18 de diciembre de 2011

Finales afines

(AGO. Primeras nieves. Diciembre de 2011)

Parecida a la vida
ya he vivido otra historia
y me quedé sin nada...

viernes, 2 de diciembre de 2011

Nubes de noviembre

(AGO. Nubes de noviembre. 2011)

Quién sabe

si el pecado se hará

más comerciable,

si será necesario

respirar de otra forma,

por ejemplo,

imitando la longitud del río.


Si habrá que descalzarse

para entrar en los bosques

y pisar como pisan los muertos

más antiguos

después de levantarse.


Quién sabe si los muertos

están despiertos siempre

leyéndose las manos

y las estrellas son

su pulso que nos mira.


Si otro tacto

más dócil

sentirá los objetos

que ahora me pertenecen

y quitará la nieve

del alero

con estos mismos brazos

alguna madrugada.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Tierra de nada


(AGO. Tarde con Isa en Lindes. Junio de 2011)




Pueblos abandonados.

Minas tristísimas.

La nieve ha jubilado sus memorias.

Narcisos en los tiestos.

Balcones solos.

Un hombre con un perro camina y silba.

Fango y barbecho.

Palacios silenciosos,

huertos y espantapájaros.

Un mastín irreal sueña y aúlla.

Tierra de nada

que ha dado todo a cambio de ofrecimientos

de aire.

Tierra de nada

de pantanos

de humo

de espinos

de cemento.

Pasto verde y sembrados para la brisa.

Deshielo de la juventud.

Precipicios.

Negrura. Acantilados. Maizales caídos.

Caserones de sombra

y de lechuzas.



Estaciones.

Caminos.

Labrantíos.

Arroyos.



Se escucha el mirlo.

Esta región heredará la lluvia.

miércoles, 12 de octubre de 2011

CABU PEÑES


(AGO. Cabu Peñes. Agosto de 2010)

Ye too norte. Ye’l norte en puntu. Per au albancia la claridá. Onde la tierra se desvanez y la lluz güel a ocle y sal. Ye fin, principiu. Ye’l cabu’l mundu, l’entamu l’agua. Ye superficie y profundidá. Castru y Gaviera onde les foles cueyen relevu y el nordés xunce les sos dos ales y echa a volar. Ye onde la rosa los vientos brama. Onde la nueche ta siempre encesa y la borrina suel madrugar. Per au traxinen toles vapores, ye per au borien tolos pesqueros y per au pasen dalgunos barcos que yá más nunca vuelven pasar.

Ta ente Verdicio y l'horizonte, camín de Viodo, diendo al Ferreru, cerca Coneo, xunto a Tezán. Au les gaviotes faen los ñeros, onde La Erbosa quedó a suañar. Dende au s’avista la vida entera como un abismu que da a l’océanu, una estayina que va a la mar. Ta ente’l cielu y precipicios, penriba’l Ferre, de Solarriba poco p’allá. Después de Lluanco, frente a Bañugues, per u se crucia pa nengún sitiu, per u se vira pal enxamás. Mui a la vera la llontanza, ta en dirección a la eternidá.

martes, 13 de septiembre de 2011

Tardes de septiembre

(AGO. Cae la tarde. 2011)

           La belleza

            se apaga

            como en septiembre

                         las alargadas tardes

                                             del verano.


lunes, 18 de julio de 2011

Varines de volador

(AGO. Maizal. Bañugues. 2010)

Alcuéntroles dacuando.

Güei yá naide les paña...

Y entovía me güel a pólvora

y a branu y paezme

mentira

que s’esfumaren estos 40 años (que

s’esfumaron. La vida namás cunde

cuando se nos ablaya):

Taben toes les fachaes encalaes

y fresques

y golía la carne guisando nes cocines

y en toos los corredores

la lleche recudiendo nes fardeles

de sábana.

Prestábanos -qué ilusiones más rases

y más fondes-

mirar cómo plantaben les estaques

d’ocálito

pal quioscu de la música

y el puestu la barraca;

y esperar los camiones colos fierros

del tiru y de la tómbola

y a aquelles portugueses de faldones floriaos

y pendientes de cobre

que diben a la presa de mio güelu

a llavar los cacharros y garrar agua.

Prestábanos, sí, muncho

nos prestaba

que llegaren los primos,

que llenaren la casa,

la comida el domingu, nel mediu´l

tendeyón, aquella mesa llarga...

Alcuéntrovos dacuando

y entovía’l nordés -el mesmu

que m’empuxa, el mesmu que m’avieya,

el mesmu que m’arrastra- traime cachos

d’aquellos paxarinos que vais

cantando y d´aquella mozuca

con cara de gitana.

Y entovía nos altos maizales

que m’aparten de mí, que separen

pasáu d’esta edá sin sustancia,

adiéntrense pareyes de recuerdos

d’amor;

y una verbena allumbra

ente’l mio corazón y una inmensa

distancia,

con guah.inos que compren

a los avellaneros

unes gafes de plástico, carraques,

restallones y manzanes

cubiertes de colorao y escarcha.

Varines de volador..., la vida ye

lo mesmu: enciéndese,

espovisa, revienta,

              y dexa

                 un filu

                    de fumu

                     qu’ensiguida rescampla.

lunes, 11 de julio de 2011

Tardes de veranu

(AGO. Llavaderu. Cortes. 2011)

Cuántes tardes de xunu nos casamos…

Nun yera más que dir hasta la presa,

xurar que nos queríamos; que nun s’acabaríen

nin los nuesos deseos nin aquel veranu.

Y un día, colos filos brillantes de munches telarañes

enrestré-y un aniellu. Ella esparcióse polen

pelos güeyos. Y yo zarré los míos.

Xunu. Mil novecientos setenta y tantos.

Tamos vivos los dos.

Pero nunca enxamás volvimos atopanos.

lunes, 27 de junio de 2011

Vacua superficie

(AGO. Portilla al verano. Cortes. 2011)

Sobre la superficie

de las cosas

se va posando

el tacto

de las manos

y hacemos nuestro

instante

al instante que pasa:

               vacío, soledad

                    incertidumbre

                        sombra.

                                   Nada.

martes, 14 de junio de 2011

Entre visillos


(AGO. Cielo y árbol. 2011)

Mira detrás de la ventana. Ve el invierno.

Calla. Baja la vista y mira sus manos.
Les da vuelta. Calla.
Pasa suaves los dedos por el vaho.
Queda mirando. Calla. Baja los ojos.
Vuelve a su piel. Despacio, va
tocándose el rostro. La soledad detrás, sobre
las ascuas.
¿Qué habrá que duela más que la belleza?
¿Qué llevar de la vida?
¿Qué pájaros son esos?
¿La noche, así de pronto?


                        La luz se apaga.

viernes, 10 de junio de 2011

Neotérico

Palomas posadas al borde de una fuente. Mosaico de Gala Placidia

Catulo, del gorrión de tu Lesbia



al morirse, voló una gran metáfora:


el amor muchas veces


             -queriendo o sin querer-


nos recorta las alas.

martes, 7 de junio de 2011

Luz Ovies Quirós. Responso

(L.O.Q. 1960)



Que estés en el cielo mejor que en la tierra, rodeada de luz y jardines amplios y un balcón de nubes desde donde puedas asomarte y vernos. Ojalá así sea. Que sigas soñando, si soñáis los muertos, con que llegue el día de que estemos juntos, como tú decías, muy tarde, muy tarde, pero para siempre, para nunca más ser ya separados. Ojalá así sea. Y que mientras tanto, mientras nos esperas, seas silbo o hálito o pétalo mismo, halles la salud que no disfrutaste. Ojalá así sea.

Que estés donde estés, con todo lo tuyo, cenizas o huesos, o halo de alma, sientas el descanso y la paz eterna. Y encuentres espacios en los que te inunden briznas de ternura, ráfagas de amor, bálsamo de hijos. Ojalá así sea. Que todo conozca, sea fuego o aire, ilusión o atmósfera, tu benevolencia y ocupes el ángulo que me señalabas en noches oscuras: "mira, mira aquella estrella". Cuántas veces salgo a la noche oscura, cuántas noches miro su oscura presencia, cuántas días percibo un fulgor distinto. Y es porque te siento, porque me titilas desde el firmamento. Eso es lo que creo y lo que me sustenta. Ojalá así sea.

Que hayas abrazado, seas lo que seas, esencia de humo, fracción de paisaje, a todos los tuyos que se fueron antes, a tu tierna madre, a tu padre joven, a tu hermano único, a tus tías guardianas. Ojalá así sea. Y que hayáis hablado, seáis soplo o lluvia o danza muy leve de la grácil nieve, del porvenir todo que no fue posible, de todas las décadas que quedaron huérfanas. Y que estéis unidos, seáis frío o éter, y no conozcáis zonas infelices. Y observéis las vigas de la casa antigua, apoyando olvidos y nombres ausentes. Ojalá así sea.

Ojalá así sea, Luz de mi camino, y no haya en tu entorno más que cielo limpio, superficie blanda, infinitud frágil donde te permitan, seas lo que fueres, rocío o neblina, seguir cultivando tu corazón manso, tus setos de hortensias. Coger los pomelos que ya estén maduros. Podar los rosales que dejaste a medias. Ojalá así sea.
Por aquí las cosas no han cambiado a penas, y la vida sigue más vacía sin ti. Bueno, han crecido un poco el magnolio, el tejo, y están muy altas todas las camelias. Lo sabes. Sospecho que bajas, riegas los recuerdos y nos merodeas. Ojalá así sea.

(La Nueva España, 27 de octubre de 2010)

Luz breve

                                          (AGO. Perfil del cielo. 2010)

Mas a pesar de todo,

ha valido la pena

ser

esta

luz

tan

breve.